Breve Resumen
David Parcerisa explora la "Matrix Reptiliana", un concepto que, aunque pueda sonar sensacionalista, se basa en investigaciones sólidas sobre la historia antigua y la influencia de razas reptilianas en la humanidad. La presentación examina la creación de la humanidad, la manipulación genética y la supresión del conocimiento espiritual, destacando la importancia del despertar de la conciencia y la liberación del control externo. Se discuten figuras clave como Enki y Enlil, y se analiza la simbología reptiliana en diversas culturas y religiones, revelando una lucha milenaria por el control de la humanidad.
- Razas reptilianas han influido en la historia humana desde tiempos antiguos.
- Enki es una figura clave en la manipulación genética y la rebelión contra el control reptiliano.
- La supresión del conocimiento espiritual y la manipulación de la sexualidad son herramientas de control.
Introducción
David Parcerisa presenta el tema de la Matrix reptiliana, explicando que aunque el término pueda sonar sensacionalista, se basa en investigaciones sólidas y evidencias. Señala que a menudo es necesario utilizar términos llamativos para captar la atención del público y fomentar la exploración profunda del tema.
Los Orígenes Reptilianos y la Historia Sumeria
Parcerisa habla sobre la historia antigua y la civilización sumeria, mencionando la existencia de varias familias o razas reptilianas y humanoides que llegaron a la Tierra hace miles de años, algunas incluso antes que los Anunnaki. Se han encontrado restos de tecnología avanzada y pisadas antiguas que no se ajustan a la cronología establecida.
El Paradigma de Anton Parks
Parcerisa destaca la importancia de Anton Parks y sus investigaciones, que abren nuevas líneas de investigación y ayudan a encajar las piezas de la historia antigua. Parks habla de la raza reptiliana uzungados, creados por los kingu, una raza draconiana dividida en tres tipos: blancos (realeza), rojos (guerreros) y verdes (pueblo). Los uzungados, en conflicto con los kingu, llegaron a la Tierra como exiliados de guerra y se establecieron en las montañas zagros, eligiendo la llanura mesopotámica para crear ciudades.
Distinción entre Uzungados y Anunnaki
Se establece una diferencia entre los uzungados, provenientes del planeta nalulcar en la Osa Mayor, y los Anunnaki de la Tierra, creados en el planeta duku, uno de los 12 planetas que orbitan alrededor del sistema maya en las Pléyades. Anton Parks describe a los adoradores del sol como razas involutivas movidas por instintos egóicos, con los kingu en la cima y los uzungados rebelándose contra sus creadores.
Las Razas Planificadoras y los Servidores de la Luz
Las hembras uzungal, custodiaban el conocimiento espiritual, están vinculadas con los servidores evolucionados, las razas planificadoras como los yurma (humanoides felinos), los suka (hombres pájaro), los dogos (receptores del conocimiento de Sirio A y B) y los hombres pez (los abgal o gnomo). Estas razas tienen roles específicos en la transferencia de vida animal a la Tierra y actúan como pacificadores planetarios.
El Dios Anu y la Conspiración contra el Matriarcado
El dios Anu conspiró contra la reina reptiliana Tiamat, expandiendo un virus entre los machos uzungal para usurpar el poder y la sabiduría custodiada por las altas sacerdotisas a más su tumba. Anu impuso el patriarcado creando una raza de guerreros para proteger a las hembras, los alumnos, en un intento de controlar el conocimiento espiritual.
Enki: El Primer Prototipo Anunnaki
Enki, cuyo verdadero nombre es Sam, fue creado en cámaras de clonaje utilizando células de varios seres, incluyendo altas sacerdotisas y la raza abgal. Enki no es un Anunnaki, sino una suma de varias razas, creado como un prototipo con características únicas como dedos palmeados y piel verdosa. Nació sin sexo y fue iniciado en las artes amatorias por su madre, mamita namu, quien le confeccionó un pene artificial biológico.
El Rol de Enki y la Creación del Homo Sapiens
Enki se convirtió en príncipe tras matar al rey en nalulcará, pero fue utilizado como rehén por el consejo de los uzungados. Diseñó al Homo Sapiens por orden del consejo para esclavizar a la humanidad, pero introdujo clandestinamente ADN calisto, permitiendo a los humanos tomar conciencia de su poder y liberarse de la manipulación. Enki se reveló contra su creador, favoreciendo a las hembras a más y arriesgando su vida para que prevaleciera el poder creador de la diosa madre.
Enlil: El Dictador y su Ascenso al Poder
Enlil fue creado por Enki de forma confusa y salió de las salas de ensamblaje junto con otros seis nunca, quienes violaron a las sacerdotisas. Enki atrapó a Enlil y le perdonó la vida, convirtiéndolo en su sirviente. Enlil ascendió al poder al encandilar a la diosa injusta, mano derecha de Anu, y se casó con ella. Recibió el título de "aquel que detiene el aliento de la palabra y el verbo" debido a su habilidad oratoria.
Los Nungall y la Rebelión contra el Mando Superior
Los nungall, también conocidos como los y en la Cádiz o los ángeles caídos, fueron los hijos de Enki que se rebelaron contra el mando superior. Fueron esclavizados para realizar trabajos forzosos en la región mesopotámica. Tras una muda de piel, aparecieron blancos albinos, lo que provocó que fueran castigados y sometidos a trabajos forzados. Enlil se convirtió en el dictador más terrible de la historia de la humanidad, influyendo en dictadores a través de capacidades psíquicas.
La Creación de los Alumnos y los Miminu
La raza usual, liderada por el séptimo de los usos, crea a los alumnos y a los múshir (gárgolas). También crearon a los miminu (grises), servidores de los draco que realizan experimentos genéticos con humanos a través de abducciones. Enki también creó a los nunca, en un intento de equilibrar las fuerzas en conflicto.
La Creación del Lulú y las Líneas Adámicas
Ante la rebelión de los nungall, el consejo pide a Enki que elabore un Lulú, una bestia de carga. Los kingus habían creado un mono erectus, y los también crearon una versión proto-hombre avanzada. Se mencionan dos líneas adámicas: Abel (neandertal empático y creativo) y Caín (erectus idiota). Enki introdujo ADN calisto y del nambú original en la línea de Caín, permitiendo una mayor capacidad para vibrar en altas cotas.
La Inversión de Roles y la Creación de Religiones
An y Enlil invirtieron los roles del bien y del mal, creando religiones para dividir al ser humano. En el Apocalipsis de San Juan, se observa una manipulación basada en el uso de naves y tecnologías holográficas para controlar y dirigir a la humanidad a través de dogmas religiosos que fomentan la discordia y el conflicto.
El Número Siete y la Simbología Reptiliana
El número siete es recurrente en la Biblia y está asociado con Enlil y Anu. Enlil fue el séptimo nunca, el único superviviente, lo que le otorga un significado de plenitud y satisfacción. El número seis, opuesto al siete, simboliza la imperfección y la falta. Enlil odiaba al hombre, creado en el sexto día, y el número de la bestia imperial es 666. La simbología reptiliana, como el águila y la serpiente, está presente en órdenes caballerescas, escudos de armas y sociedades secretas.
El Caduceo y el Despertar Sexual
El caduceo, con dos serpientes entrelazadas, es el símbolo de Enki y la familia de la serpiente, representando la sabiduría y el conocimiento ancestral. Es un símbolo antiluminati de conocimiento alquímico basado en la kundalini. El sexo es un vehículo de iluminación, y la élite se esfuerza por deformar el verdadero sentido de la sexualidad. La serpiente en el Génesis no tentó a Eva con la manzana, sino que le dio el conocimiento para aparearse y despertar de la manipulación de los dioses.
El Sexo como Ascensor y la Liberación del Ser Humano
El sexo es un ascensor que fusiona la energía de la tierra con la del cielo, permitiendo al ser humano formar parte del todo. Enki quiso transmitir este mensaje al liberar a Adán y Eva, pero fue adulterado y satanizado. La humanidad está esclavizada por seres que manipulan las mentes para que no seamos conscientes de nuestro poder divino. Se fabricaron dioses falsos para eclipsar el verdadero Dios que constituimos nosotros.
